Hiroshi Sugimoto. Análisis.


“I'm a habitual self-interlocutor.  One evening while taking photographs at the American Museum of Natural History, I had a near-hallucinatory vision. My internal question-and-answer session leading up to this vision went something like this:  "Suppose you shoot a whole movie in a single frame? " The answer: "You get a shining screen. " Immediately I began experimenting in order to realize this vision. One afternoon I walked into a cheap cinema in the East Village with a large-format camera. As soon as the movie started, I fixed the shutter at a wide-open aperture. When the movie finished two hours later, I clicked the shutter closed. That evening I developed the film, and my vision exploded behind my eyes”

-Hiroshi Sugimoto

Ese es el comentario de Hiroshi Sugimoto, fotógrafo japonés, bajo su serie fotográfica “Teatros” La idea nació en 1976 en una conversación consigo mismo, y sus obras contagian ese espíritu, provocándonos un estado de reflexión filosófica. Tiene un estilo minimalista; poético; elegante; en donde el ingenio y la belleza se entrelazan con gracia. En este caso, podría decirse que usó luz natural, aunque él mismo haya dicho que “La luz de los cines es muy artificial”

Las salas de cine no son muy buenos lugares para sacar buenas fotos, ¿según quién? Un fotógrafo decía: En donde hay luz, puede haber fotografía, y Sugimoto habrá tenido esas mismas palabras (pero en forma de imágenes) dentro de su cabeza. No puedo identificar la cámara que usó, pero deduzco que habrá sido alguna con un disparador automático, ya que al tener el obturador abierto por 1 hora o más, ni la cámara ni los objetos fotografiados deberían tener un mínimo de movimiento para lograr esta nitidez, aunque el barrido del proyector y de algunos espectadores debido al movimiento delata la técnica de larga exposición.

A primera vista y sin datos externos más que la imagen misma, la fotografía transmite una mezcla de misticismo y elegancia. Honestamente nunca había escuchado hablar del autor ni había visto su trabajo, pero tras investigarlo encontré que tiene un estilo particular y podría sugerir la palabra “Sugimotesco” a obras que transmitan elegancia, profundidad espiritual o abstracción. En cuanto a esta fotografía en particular: La luz del proyector se derrama sobre los objetos cercanos disipándose hasta las penumbras, esta es una de sus otras características, jugar con las sombras y las graduaciones de la luz en donde el blanco y negro es fundamental. En cuanto a encuadre la simetría resulta igualmente dinámica, la repetición de objetos crea profundidad y las líneas naturales de las sillas, los faros de luz y los balcones nos dirigen la mirada hacia el centro en donde brilla la pantalla.

El punto de vista desde el cuál se tomó esta fotografía remite a la sala de proyección, como si la cámara fuese el proyector. Esta idea me remite a Cinema Paradiso, aunque esta fotografía no tiene nada que ver con la inocencia. En cuanto a clima, me remite más a Poltergeist, la pantalla blanca es el personaje principal: un ente paranormal, inexplicable, y los espectadores son fantasmas. Sin embargo, Cinema Paradiso habla de un amor al cine que también podemos sentir en esta pieza gracias al nostálgico ByN y al movimiento generado por la larga exposición que despierta en nosotros esa sensación de añoranza cuando nos ponemos a pensar en el tiempo del cine en sí mismo, o en la tristeza que provoca el no poder ir al cine en tiempos de Covid.

El uso de esta imagen es más bien artístico y de carga simbólica, las obras de Sugimoto son financieramente muy valoradas en todo el mundo, y principalmente en la meca cultural: Nueva York. Requiere de los espectadores no sólo sus miradas, sino de la mente en general, porque es una fotografía disparadora en donde cada uno puede imprimirle sentido según su contexto individual. 

En una entrevista declaró que no se trata “del momento preciso” sino, "de la duración en el tiempo” Para Hiroshi Sugimoto “la cámara es una máquina capaz de representar el sentido del tiempo” y esa idea se revela en sus series fotográficas, principalmente en la analizada en donde aproximadamente 172.000 fotogramas están atrapados en uno.


Planta de luces:



 

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